Las compañías de tipo familiar tienen una fuerte influencia cultural proveniente de las familias que están detrás, lo que genera un impacto de la filosofía familiar en las empresas familiares. Esas familias empresarias son las que determinan cómo quieren que se vea la compañía y los elementos que están dispuestos a tener o no, en su gestión empresarial.

Hace algunos años tuvimos un caso en una empresa familiar en la que, estando presentes en la reunión de Junta Directiva la cual contaba con miembros externos e independientes a la familia, el Gerente dentro del punto “Varios”, planteó un asunto: “la semana anterior, se habían robado su computador portátil de su oficina”.

En un inicio, ese no es un tema que debería estar en “Varios”, de hecho ese punto no debería existir, porque se presta para que muchos temas que pueden ser complejos o delicados, no se identifiquen claramente en el orden del día y no se les dé el estudio previo que deberían tener, lo cuál no es una buena práctica en las Juntas Directivas.

Apartando ese hecho, el Gerente inicia el desarrollo de su punto explicando que la compañía no cuenta con cámaras de seguridad en las oficinas, aunque sí en la entrada y se identificó que ese día no ingresaron personas ajenas a la empresa, por tanto, la conclusión es que se trató de uno de los empleados.

El Gerente proponía que se instalarán cámaras de seguridad en las oficinas y que se contratará a una empresa de vigilancia diferente, que estuviera constantemente monitoreando la actividad de las cámaras para detectar estas situaciones a tiempo.

Uno de los miembros de la Junta Directiva, luego de superar el asombro porque el computador del Gerente, que contiene información detallada y confidencial de la compañía, fuera sustraído de su propia oficina, votó a favor de instalar cámaras y redoblar el esquema de seguridad. A él se unieron otros miembros de la Junta, quienes estuvieron de acuerdo con que eso no debería pasar.

El último miembro de la Junta Directiva que aún no había votado, indicó que si bien estaba de acuerdo con que la seguridad debería ser reforzada, le preocupaba aún más que un empleado hubiera sido el responsable. Le parecía que no tenía ninguna justificación que una persona que trabaje en la empresa tuviera ese tipo de alcances y le preocupaba aún más si había alguien más que estuviera pensando en hacer lo mismo que ese empleado.

Además, enfatizó en el proceso de selección que se realizaba en la empresa, y se evidenció que era bastante informal y sin muchas verificaciones para los candidatos que iban a contratar. Esto se daba porque la filosofía de la familia había sido apoyar a los candidatos que se presentaban a su compañía, tomando la decisión más por intuición y afinidad que por cualquier otra característica.

Cuando este tipo de situaciones se presentan, es necesario validar cuál es la filosofía de la familia empresaria con relación a este tipo de casos y poder tomar las medidas necesarias y coherentes con esa realidad. En general, a un empresario no le gustaría que se realicen robos en su organización, sin embargo, hay algunos que son más radicales con estos casos que otros, y muchas veces no son conscientes de cómo sus procesos de selección ayudan o no a que se presenten estas situaciones, aclarando que nunca habrá un 100% de certeza de que no suceda.

La familia debe impregnar su filosofía familiar en cada proceso y en cada parte de la compañía para que realmente sea una empresa que refleje sus valores, porque no siempre son conscientes del impacto de sus decisiones para fortalecer o debilitar esos pilares en la empresa.

Equipo Family Firm